viernes, 25 de abril de 2008

Eres callado como la brisa del mar,
enérgico como el rey con su pueblo,
fantástico como un cuento de hadas,
simple como un beso al amanecer,
amable como tú mismo
y sensible como el corazón
de una muchacha en flor.
Eres sencillamente eso.
Sí, tan sólo por eso te quiero,
eres tú y nadie más que tú,
no hay quién se parezca a ti,
sólo tú posees cualidades
que con el paso del tiempo
a muchos otros les han
envejecido en el corazón.
He tardado en encontrarte,
eso es verdad,
pero ha merecido la pena
pasar lo que me he pasado
buscándote.
No te alarmes,
no te estoy halagando,
estoy exteriorizando
lo que siente mi corazón,
la pena es que
no me lo pueda sacar
para que lo
examines tú mismo,
amigo, amante,
no me digas que me quieres,
dime tan sólo lo que sientes.
Demuéstrame que
me quieres con hechos
y no tan solo con palabras
que se mezclan en el aire.
Quisiera estar a solas contigo,
mirando las mismas cosas,
sintiendo los mismos
sentimientos,
hablando del mismo tema,
oyendo la misma música...

Agnes

2 comentarios:

Envite dijo...

Es tan bonito y cariñoso que no puede ser para mí. Aunque lo parezca. No me lo creo, que sea para mí.

Agnes dijo...

Es algo que escribí hace muchos años, cuando aún era una niña (en edad). Realmente no era para nadie, era el resultado de mis sueños de encontrar una persona así, y mira por donde la encontré. Te quiero.